Estas son las razones del por qué el Gobierno de Gustavo Petro subió el precio del ACPM

El incremento del valor del galón del diésel ha desencadenado las protestas del gremio transportador. Los camioneros bloquean con sus automotores las vías del país en rechazo a la medida. El Ministerio de Hacienda anunció que se agotó el subsidio para este combustible.

ECONÓMICAS

Martes, 3 de septiembre del 2024

Muchas vías del país, sobre todo las de acceso a Bogotá, están siendo bloqueadas por un grupo de transportadores. El impedimento de la movilidad empezó desde las primeras horas de este martes. Las razones son por el aumento en el precio del ACPM, que empezó a cobrarse desde el viernes 30 de agosto del 2024.

EL HOME NOTICIAS buscó la explicación del por qué el gobierno de Gustavo Petro ordenó el aumento de 1.904 pesos en el valor de cada galón del diésel. Esto qué quiere decir, que el precio promedio en 13 ciudades de Colombia queda en 11.360 pesos, esto en las estaciones de combustible.

Tengamos en cuenta que la administración de Petro empezó el 7 de agosto del 2022. Es lo que lleva a los expertos en el tema a hacerse un interrogante: ¿Por qué el Gobierno esperó dos años para aumentar casi 2.000 el valor del diésel? Esta pregunta está interconectada con las razones que ha ofrecido el mandatario colombiano.

“Desde el año 2019 el país no sube el diésel porque se congelaron los precios sin tener en cuenta que estos suben y que Ecopetrol, por ley, usa el precio internacional del petróleo para producir el diésel y la  gasolina. Internacionalmente estos subieron agravados por la caída del peso ante el dólar. La deuda alcanzó casi 80 billones de pesos y los pagos de deuda externa e interna del país llegan a 110 billones de pago anual”, es la explicación con la que Petro justifica la medida.

De acuerdo con la ilustración que ofrece la Casa de Nariño esta decisión, el primer aumento del precio del combustible en sus primeros dos años de mandato, busca subsanar el déficit de 6.000 pesos en el Fondo de Estabilización de Precios del Combustible (FEPC).

«Actualmente, cuando un consumidor compra diésel en una estación de servicio, el consumidor paga menos de 50% del precio que cobra el refinador o importador de ese combustible. El Gobierno Nacional, por medio del FEPC, paga el resto. Esto ha llevado a un problema fiscal histórico que ha representado acumuladamente, en pesos de 2024, cerca de 115 billones de pesos», explicó el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla González.

Para uno de los gremios de transportadores, Fedetranscarga, la explicación es otra, que se busca nivelar al precio internacional para así vender a otros países, como México, el combustible. Exigen que antes de exportar primero se debe pensar en el abastecimiento nacional.

“Colombia es un país productor de petróleo, que refina el total del diésel que consumimos, para así aprovechar la ventaja absoluta que tiene esta condición; no admite el Gobierno esta verdad y se escuda en el aumento hecho al SICE-TAC (Sistema de Información de Costos Eficientes, que elabora el Ministerio de Transporte respecto al transporte automotor de carga) en cuanto el aumento de costos por el incremento del diésel”, manifestó Fedetranscarga a través de un comunicado.

Además, agrega que este sistema de evaluación esta desactualizado, que “carece del importante componente de oferta y demanda”.

Por su parte la Federación Nacional de Comerciantes (FENALCO) envió una alerta, que este aumento en el combustible estará incidiendo en la canasta familiar de los colombianos, lo que vendría a ser un duro golpe al bolsillo del ciudadano.

“Aumento en el precio del ACPM se trasladará a los precios de los productos, lo que generará inflación y afectará el poder adquisitivo de las familias. Prácticamente la totalidad de los bienes que conforman la canasta familiar subirán de precio”, expresó Jaime Cabal Sanclemente,  presidente de este gremio, quien dice analizar la situación desde la perspectiva de “un débil crecimiento de la  economía”.

Además, observó que el aumento de los costos en el transporte de productos se verá reflejado en la economía de los hogares.

“Subir 6.000 pesos, así sea gradualmente en menos de año y medio, tendrá un impacto demoledor en los fletes, muy superior al 30% acumulado. El sector más perjudicado, aparte del transportador, será el comercio”, puntualizó Cabal Sanclemente.

Redacción Económica

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