Los detalles del juicio político contra el expresidente Donald Trump en el Senado de los Estados Unidos

La oposición se mantiene firme en su postura de que el proceso es ilegítimo desde la Constitución Nacional. Trump es acusado de “incitar a la insurrección”, ante el ataque al Capitolio el pasado 6 de enero. Los republicanos afirman que de la misma manera se debe acusar a la congresista Nancy Pelosi.

ESTADOS UNIDOS

Miércoles, 10 de febrero del 2021

El mudo tiene sus ojos en el juicio que afronta el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, que empezó este martes en el Senado, que en este escenario enfrenta a la oposición de los republicanos, que afirman que este proceso tiene una falta de legitimidad constitucional. No obstante, en medio de un largo debate, el Senado dio su voto que el juicio era constitucional.

Después de haber logrado aprobar la destitución de Trump en la Cámara de Representantes, donde los demócratas tienen una mayoría cómoda, es poco probable que logren una mayoría calificada en el Senado, donde están empatados por votos con los republicanos y enfrentan una gran resistencia para convencer a la oposición de responsabilidad respuesta directa del expresidente en el ataque al Capitolio el 6 de enero.

El artículo de juicio político acusa a Trump de “incitar a la insurrección”, pero uno de los senadores republicanos, Ron Johnson, ya ha dicho que no solo no aceptará esta acusación contra el expresidente, sino que admite imputar esa misma responsabilidad a Nancy Pelosi, líder de la mayoría demócrata en la Cámara de Representantes.

Johnson afirma, que Pelosi tuvo durante los últimos cuatro años un discurso radicalizado de persecución política al expresidente, que alentó acciones más violentas por parte de los partidarios de Trump, llevándolos a buscar justicia por sus propias manos en el ataque al Capitolio.

Casi todos los senadores republicanos (45 de 50) ya han dicho que rechazarán el artículo de juicio político, alegando que está herido por la inconstitucionalidad porque está tratando de destituir a un presidente que ya salió de la Casa Blanca el 20 de enero.

“El presidente no estuvo presente ni fue escuchado en la Cámara de Representantes. Ni siquiera recopilaron pruebas. En cinco horas, analizaron el proceso y lo retiraron. (…) Parecía un juicio de la era soviética”, dijo Bill Cassidy, un senador republicano, en una entrevista televisiva reciente.

Los demócratas invocan un trasfondo histórico, en el que se aplicaron sentencias de despido a funcionarios estatales, incluso después de su dimisión (aunque nunca tuvo éxito con ningún presidente) y recuerdan que la condena de Trump tendrá consecuencias efectivas, que le impedirán notablemente si se postula para un cargo público. de nuevo.

Este tema es particularmente sensible dentro del Partido Republicano, ya que varios senadores continúan expresando su apoyo político a Donald Trump y depositan su confianza en su regreso a una candidatura presidencial en 2024, que sería rechazada si hubiera una condena en la cámara alta del gobierno. Congreso.

Otros senadores republicanos, como Lindsey Graham, dicen que si hay razones para admitir la responsabilidad de Trump en el ataque al Capitolio, esa acción debe ser juzgada bajo el sistema legal convencional.

“Si creen que ha cometido un delito, pueden acusarlo como cualquier otro ciudadano. La acusación es una cosa diferente, es un juicio político ”, argumentó Graham, en el canal de televisión CBS Face the Nation.

Para obtener la condena de Trump, los demócratas tendrían que convencer al menos a 17 senadores republicanos de que alcancen 2/3 de los votos, un objetivo que parece difícilmente alcanzable.

Fuente: Inforpress / Lusa

Redacción Noticias Internacionales

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