Golpe sin precedentes: EE. UU. mete a Gustavo Petro a la Lista Clinton y desata la mayor crisis diplomática para Colombia en décadas
24 octubre, 2025
Crisis en la inteligencia financiera:
Petro acepta renuncia de Llinás en medio del escándalo por la Lista Clinton y la suspensión de la UIAF
El presidente Gustavo Petro aceptó la renuncia de Luis Eduardo Llinás a la dirección de la UIAF en un momento crítico para la inteligencia financiera colombiana. La entidad fue suspendida de la Red Segura del Grupo Egmont tras filtraciones sensibles, mientras Estados Unidos incluyó al mandatario, a su familia y a su círculo más cercano en la temida Lista Clinton. Jorge Arturo Lemus, actual jefe de la DNI y hombre de confianza de Petro, asumirá de forma temporal el control de la unidad.
Redacción Política
Lunes, 27 de octubre de 2025
La Casa de Nariño oficializó la salida de Luis Eduardo Llinás de la Unidad de Información y Análisis Financiero, UIAF, mediante el Decreto 1118 del 24 de octubre de 2025, en uno de los momentos más turbulentos para el sistema de inteligencia económica del país. Su renuncia llega en medio de la suspensión temporal de la UIAF de la Red Segura del Grupo Egmont, tras la filtración de una comunicación confidencial relacionada con la compra del software espía Pegasus, y en paralelo con la inclusión del presidente Gustavo Petro, su esposa, su hijo y al ministro del Interior, Armando Benedetti en la Lista Clinton del Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
El mandatario designó como encargado de la UIAF a Jorge Arturo Lemus Montañez, actual director de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI), quien se convierte en la figura clave para recomponer la credibilidad de la unidad encargada de prevenir y detectar operaciones de lavado de activos y financiación del terrorismo.
Lemus, abogado de la Universidad La Gran Colombia, con estudios en Gestión Pública de la Universidad de los Andes y especialización en Derecho Administrativo de la Santo Tomás, ha dirigido entidades de seguridad y control como la Cárcel Distrital de Varones y Anexo de Mujeres y la Unidad Administrativa de Bomberos de Bogotá. Su designación se interpreta como un movimiento estratégico de Petro para blindar el control interno de los flujos de información financiera del Estado.
Renuncia entre presiones y desconfianza internacional
La gestión de Llinás, iniciada en septiembre de 2022, ya enfrentaba tensiones internas y críticas externas. Su nombre estaba vinculado a los recientes tropiezos de la Dian, donde también ejercía como director encargado, y a los incumplimientos en metas fiscales que, según fuentes de alto nivel en el Ministerio de Hacienda, habrían acelerado su relevo.
Pero la presión decisiva provino del ámbito internacional. La suspensión de la UIAF por parte del Grupo Egmont, red que agrupa a las unidades de inteligencia financiera del mundo, representó un duro golpe a la cooperación global contra el lavado de activos. La decisión se produjo tras revelarse información clasificada sobre una comunicación de la unidad antilavado de Israel (IMPA) que advertía sobre la adquisición del software Pegasus, utilizado en operaciones de espionaje estatal.
Este incidente deterioró la confianza en el sistema colombiano de intercambio de datos financieros y coincidió con la medida del gobierno de Estados Unidos de sancionar a Petro y a su entorno con la inclusión en la Lista Clinton, que congela activos y prohíbe cualquier vínculo financiero o comercial con entidades estadounidenses.
UIAF: entre el escándalo y la defensa del Gobierno
En respuesta a las sanciones, la UIAF emitió un comunicado rechazando la inclusión del presidente y sus allegados en la Lista Clinton, calificándola de “violatoria del debido proceso” y de desconocer los esfuerzos de la actual administración contra la corrupción y la financiación del terrorismo.
“La UIAF no ha recibido reportes de operaciones sospechosas (ROS) que vinculen al presidente Gustavo Petro, a la primera dama o a su hijo Nicolás Petro con actividades ilícitas”, señaló la entidad, agregando que tampoco existen requerimientos de la Fiscalía, Corte Suprema ni autoridades extranjeras para investigar su patrimonio o movimientos financieros.
Sin embargo, la coincidencia entre la defensa institucional de la UIAF, la suspensión internacional y la crisis diplomática con Estados Unidos deja al gobierno en una posición de vulnerabilidad frente a los organismos multilaterales que supervisan la transparencia financiera.
Momento de inestabilidad en el Gobierno
La salida de Llinás también deja a la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) en una nueva transición. Según fuentes del Ministerio de Hacienda, el viceministro general Carlos Emilio Betancourt Galeano asumió temporalmente el cargo, convirtiéndose en el cuarto director de la Dian durante el actual gobierno, un hecho que refuerza la percepción de inestabilidad y falta de continuidad en la administración fiscal.
Mientras tanto, Lemus deberá restablecer la confianza internacional en la UIAF y garantizar la reconexión con la red Egmont, un paso indispensable para mantener la cooperación global en la detección de lavado de activos y financiamiento del terrorismo.
Redacción Política