A la cárcel el médico Ignacio Soler por una paciente que murió durante una cirugía

En medio de una liposucción falleció una joven de 24 años, según las autoridades, el procedimiento quirúrgico se hizo en un sitio que no cumplía con las exigencias de ley y hubo serias fallas. A las dos auxiliares que acompañaron al médico en la práctica estarán en casa por cárcel.  

JUSTICIA

Jueves, 9 de julio del 2020

Un juez de Garantías ordenó enviar a una prisión al médico Ignacio Alberto Soler Moreno, en respuesta a los señalamientos que hizo en su contra la Fiscalía. Se les acusó de homicidio simple a título de dolo eventual, por la muerte de una joven de nombre Wendy Alexandra Buesaquillo Giraldo, de 24 años. Los acusados no aceptaron los cargos que les hizo el ente investigador.

En la misma diligencia judicial el despacho estableció que las auxiliares de enfermería Karen Daniela Rodríguez Cárdenas y Laura Jimena Mantilla Leal, permanecerán bajo detención domiciliaria.

A este grupo de profesionales se les responsabiliza de la muerte de Wendy Alexandra durante una cirugía estética, que ocurrió el pasado 4 de julio, en un centro médico ubicado en la calle 140 con carrera 10 A, del barrio Cedritos, al norte de Bogotá.

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La paciente fue sometida a una liposucción, ese jueves. Todo empezó a las 8 de la mañana. La persona que acompañaba a la mujer, su señora madre, Adriana Giraldo, fue informada inicialmente que todo había salido bien, que el procedimiento había culminado con éxito. Esperó que se diera la supuesta recuperación. Sin embargo, una hora después le avisaron de la triste realidad, que la paciente había muerto en el quirófano.

La señora Adriana cuenta, que esperó impaciente en un primer piso, en donde se rumoraba que algo malo había ocurrido en el consultorio del médico Soler, lo que hizo que subiera y exigiera una respuesta a las auxiliares de lo ocurrido. Fue así como contaron el fatal desenlace, que su muerte se produjo por una insuficiencia respiratoria.

Los familiares reportaron el caso a las autoridades. El pasado sábado llegó al lugar unos policías, que apenas se percataron de los detalles del trágico episodio, después de recaudar el material probatorio, capturaron en flagrancia al galeno y a sus dos auxiliares.

En un informe que realizó la Secretaría de Salud de Bogotá se precisa que el sitio no contaba con los elementos necesarios, que el lugar no estaba acondicionado para realizar este tipo de procedimientos clínicos, de acuerdo con las exigencias de las autoridades sanitarias.

Los funcionarios del Distrito ordenaron el día de la inspección el cierre del establecimiento, esto porque además de la muerte de la joven se supo de otras denuncias en contra del galeno, de fallas en otros procedimientos.

Redacción Justicia

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